Brazo de Chocolate!

Buenos días!!!

El postre de hoy se lo dedico a Monmo, mi perro, ahora entenderéis porqué.

Para fin de año decidimos hacer un Tronco de Navidad. Era el primero que hacíamos mi madre y yo, por lo que estábamos muy ilusionadas. Nos quedó perfecto, con una pinta irresistible.

Una vez decorado y emplatado lo dejamos sobre una mesa del comedor donde estaba toda la comida que íbamos a cenar esa última noche del año.

Seguíamos preparando la cena y vistiéndonos cuando, de repente, escuché:

- MONMOOOOOO!!!- Era mi madre chillando.

Sí... el perro se había abalanzado sobre el tronco y se lo había comido enterito!!! 

Nuestra cara fue un poema! 

Supongo que estaba irresistible tanto por fuera como por dentro...

Como navidad ya ha pasado he decidido hacer un Brazo de Chocolate, solo apto para auténticos golosos y amantes de este dulce. 

Es una receta fácil y rápida de hacer, el relleno lo puedes hacer de nata, crema de castañas o de cualquier otro sabor.

Ingredientes y utensilios necesarios para que te quede un brazo de chocolate delicioso:

Para el bizcocho

• 4 huevos                                                                           
• 100 g azúcar blanco
• 1 sobre de vainilla en polvo (8g)
• 120 g harina de repostería
• Una pizca de sal

• 2 boles
• Varillas o batidora de varillas
• Medidor
• Tamizador o colador fino
• Papel de horno
• Bandeja de horno

Una vez todo preparado vamos a empezar!

Primero separamos la clara de la yema. Ponemos las claras con la pizca de sal en un bol grande y las montamos. Si tienes una batidora de varillas irás más rápido y te quedará perfecto, pero si solo tienes varillas no te preocupes, yo lo he hecho así y me ha quedado genial, eso sí, es un poco más trabajoso.

En mitad del proceso de montado añadiremos el azúcar y la vainilla poco a poco y seguiremos montando.

Al terminar batimos las yemas separadas y las añadimos junto las claras montadas removiendo suavemente.

Añadimos la harina de repostería tamizada y mezclamos con movimientos envolventes.

Precalentamos el horno a 180ºC arriba y abajo.

Preparamos una bandeja de horno cubriéndola con papel de horno. Para evitar que el papel se mueva añadimos un poco de masa en cada esquina, esto hará de pegamento entre bandeja y papel.

Vertemos la masa en la bandeja y la extendemos uniformemente por toda la superficie. Para finalizar, lo dejamos hornear durante 10 minutos.

Lo retiramos del horno y, con cuidado, enrollamos el bizcocho sin retirar el papel. Después lo envolvemos en un paño húmedo y lo dejamos enfriar.

Mientras tanto podemos ir preparando el relleno y la cobertura. para eso necesitaremos:

• 100 g de chocolate para fundir
• 200 g de nata líquida para montar
• Chocolate blanco
• 50 g de agua
• 50 g azúcar
• 50 g mermelada de fresa

Es importante que la nata esté muy fría para que pueda montarse bien.

Derretimos el chocolate con 75 g de nata líquida ya sea en el microondas o en baño maría. Dejamos enfriar la mezcla hasta temperatura ambiente.

Montamos los 125 g de nata restante. Una vez el chocolate ha alcanzado la temperatura deseada le añadimos lentamente la nata montada y lo mezclamos todo suavemente, sin romper la textura.

En una sartén calentamos el agua, el azúcar y la mermelada hasta la ebullición, mientras removemos con una cuchara de madera. Este almíbar de mermelada hará más jugoso el bizcocho. Dejamos enfriar un poco la mezcla y desenrollamos el bizcocho con cuidado. Lo untamos, por la parte interior, con el almíbar.

Seguidamente, con la ayuda de una espátula, extendemos la mezcla de nata y chocolate, y volvemos a enrollar el bizcocho, esta vez sin el papel.

Cubrimos todo el tronco con la mousse de chocolate restante.

Para la decoración he utilizado chocolate blanco. 

Fundimos un poco de chocolate blanco (unos 50 g) con una cucharada de leche y lo dejamos enfriar. Lo introducimos dentro de una manga pastelera con una boquilla redonda de 1 mm o con un agujero pequeño, y con movimientos de ziga-zaga decoramos toda la parte superior del tronco.

Si queréis darle un toque más fantástico a la decoración, sobre una superficie plana congelada (si es una placa de mármol o metálica irá mejor) hacemos unos movimientos de ziga-zaga, más juntos y en distintas direcciones, con el chocolate blanco y la manga pastelera.

Cuidadosamente separamos el chocolate de la superficie congelada y listo! Ya tenemos una pieza de decoración que podemos poner encima del tronco o clavarlo en él.

Espero que os haya gustado esta receta y que la hagáis en casa!